
de esta cesantía reinante
en el planeta Chile.
El señor es contigo
con nosotros no quiere nada
los milagros han cesado
en los últimos dos mil años.
Bendita seas entre todas las mujeres
y entre los hombres también
y bendita la mano que nos puedas brindar
con el dueño de una empresa.
Santa María, Madre de dios
y madre de los desocupados
genera por intermedio del espíritu santo
nuevas fuentes de trabajo
ahora y el próximo mes
hasta el día de nuestra jubilación.
Así sea.
Amén Madre. Amén.